Cuando Sheila Wonders volvió al Raval después del accidente, (http://leminipimer.blogspot.com/2011/06/rodrigo-leao-comedia-de-deus-el.html) un extraño fenómeno conmocionó el barrio. Los hombres caían desmayados al ver a Sheila pasear por las calles, ir a comprar a la frutería o yendo a tomar el café en algun bar. La epidemia de desmayos entre el público masculino al ver el ligero paso de Sheila por las humildes calles del vecindario causó estupor entre las autoridades sanitarias de la nación. La zona fue aislada del resto de la ciudad si ya no lo estaba suficientemente. Y mientras la República Independiente del Raval estaba sometida a las fuerzas telúricas que la simple presencia de la señorita Wonders desencadenaba a su paso, el mundo continuaba su curso. Las mujeres encerradas en las iglesias católicas, las mezquitas musulmanas, los oratorios sijs y los bajos habilitados para el culto evangelista rogaban a sus dioses que cesara el encanto. Los niños en las escuelas pedían al presidente que todo volviera a la normalidad. Cuando Sheila tomó su vuelo hacia América el fenómeno acabó.
Poco tiempo después de que Sheila dejara el barrio para reunirse conmigo en Chicago, fue entrevistada por Oprah Winfrey en su programa semanal. Oprah le preguntó, ¿Por qué cree Miss Wonders que este extraño fenomeno sucedió?
Sheila simplemente contestó con una sonrisa... porque tengo el corazón salvaje.
Documento gráfico del suceso. La Vanguardia
Y aquí, esta canción que tanto le gusta a Sheila.